Pésimo hotel. Supuestamente es un hotel Boutique y ni una cajita de pañuelos (Kleenex) pueden poner en las habitaciones. No hay ni un lugar decente para trabajar en la habitación, pues no tiene escritorio, ni ganchos en la habitación, ni ponen completas las toallas, y solamente una botellita de agua por estancia en vez de diario. No cuentan con un restaurante en forma. Todo lo que supuestamente dan está condicionado, y de mala gana o malos modos del personal. Y por si eso fuera poco la habitación es de lo más ruidoso que he conocido. Las ventanas no cierran bien y justo al lado del hotel hay un taller mecánico con música de ese tipo de lugares a todo volumen. En las noches los perro no dejan de ladrar. Deberían poner ventanas de doble cristal para cuidar la privacidad y descanso. Por lo que cobran no deberían dar el tipo de servicio de hotel casi de paso que dan. Seguro no vuelvo a usar ni recomendar éste hotel.