- En la habitación, NO HAY AIRE ACONDICIONADO, sólo en el salón, con lo cual te asas para dormir; además de tener unas sábanas bajeras de plástico protectoras que te hacen sudar aún más. Dormir en verano, bastante incómodo por ambas cosas.
- A la llegada, LA CAMA TE LA TIENES QUE HACER, tienes las sábanas allí para hacerte las camas. Por supuesto, nada de entrar a limpiar ni hacer camas durante la estancia.
Nosotros llegamos después de las 20 h, cogimos la llave de una caja fuerte, pero NO TUVIMOS TOALLAS HASTA EL DÍA SIGUIENTE. No hay alfombrilla de ducha, a pesar de PAGAR LAS TOALLAS APARTE, no incluye alfombrilla.
- No incluye NI GEL NI CHAMPÚ ni siquiera a la llegada, de cortesía. Un único rollo de papel higiénico por estancia para todos.
- Tuvimos que correr el frigorífico porque se nos cayó una cosa y debajo había porquería de todo tipo, no sé desde cuando no lo habrían movido.
- A la cocina le faltan algunas cosas básicas como un tostador.
- El armario, con las tuberías y llave de paso dentro y en la otra puerta una columna.
- Lo mejor, la amplitud del salón y habitación y limpieza de toallas y sábanas.