Este hotel se ha convertido en nuestro punto de partida y cierre preferido para viajar por Europa, y ya con toda confianza puedo decir que es nuestra opción favorita. Como siempre, organizo mi reseña en tres aspectos clave:
A. Ubicación: A solo 15 minutos del aeropuerto de Madrid en Uber (unos €20), este hotel ofrece también excelentes conexiones en transporte público. La estación de metro El Carmen está a pasos, y Ventas queda a 5 minutos caminando. Desde ahí se llega fácilmente a cualquier punto turístico. Ideal si viajás con poco equipaje o querés ahorrar.
B. Servicio: Aquí se siente la diferencia. El trato es siempre amable, sin importar el turno. Nos encontramos con Silvia, una colaboradora excepcional, que nos orientó con calidez al inicio y final de nuestro viaje. Su atención fue tan especial que hasta otro empleado la reconoció solo con nuestra descripción: “Debe ser Silvia, ella es un amor”. Ese tipo de personas te hacen sentir como en casa.
C. Relación precio/calidad: Habitaciones amplias, silenciosas, con camas cómodas y todos los detalles que uno agradece: gym pequeño pero funcional, servicio de guarda de maletas (€3/día), restaurante/bar, buena ubicación y muchas cafeterías alrededor. Todo por un precio justo que no compromete el resto del viaje.
En resumen: una joya en Madrid, ideal para arrancar o cerrar tu travesía sin sorpresas. Si querés más info, escribime por Messenger: @mrfunkherrera.
